Aquellos fans que pensaban que las controversias se habían acabado para el equipo de New England, se equivocan. Como ya no es de extrañar, una nueva acusación en contra Belichick y el equipo nace para beneplácito de los detractores de New England quienes como todos sabemos, no son pocos.
La nueva acusación, bautizada como "headsetgate" indica que los Patriots fueron responsables por fallas en los auriculares sufridas por el equipo de Pittsburgh la noche de ayer.
Aquí va la historia:
Durante la primera parte del partido el equipo de los Steelers tuvo dificultades con los auriculares, aquellos que usan los entrenadores para comunicarse entre ellos; estos aparatos sufrían una interferencia escuchándose la trasmisión de la radio deportiva local que trasmitía el partido, dificultando de esta manera la comunicación entre los técnicos del equipo.
Después del partido el entrenador de los Pittsburgh mostró su molestia por lo sucedido:
"Estuvimos escuchando la trasmisión radial de los Patriots durante gran parte de la primera mitad", indicó Mike Tomlin.
Para en otro momento expresar:
"Ese siempre es el caso aquí".
Cuando la prensa quiso confirmar con el entrenador si lo que quería decir era que eso siempre ocurría casa vez que jugaban en el Gillette, este respondió:
"Ya dije lo que dije".
Minutos después se dio a conocer el siguiente comunicado emitido por el vocero de la NFL, Michael Signora:
"En el primer cuarto del partido de esta noche, los entrenadores de Pittsburgh experimentaron interferencia en sus auriculares causada por un problema en la infraestructura de energía del estadio que se agravó por el mal clima. Los equipos de comunicación de los entrenadores, incluyendo los auriculares, son proporcionados por la NFL para el uso de ambos equipo en el día del partido. Una vez que el problema se resolvió, los equipos funcionaron correctamente y sin problemas adicionales ".
Como menciona el vocero de la NFL. Los equipos de comunicación pertenecen y están bajo la responsabilidad de la NFL y no del equipo de casa.
Cabe resaltar que los Patriots no fueron inmunes a estas fallas de la comunicación, tal como lo detalló Belichick esta tarde:
"Tuvimos problemas en la primera mitad y luego parece que se mejoró, pero luego volvió a ocurrir al final de juego y la mayoría de problemas las tuvimos en nuestras últimas 2 posiciones de balón, en defensa y ataque… No es un problema poco común, nosotros tuvimos que usar señales para realizar nuestras jugadas".
Ciertamente que esta nueva acusación o conatos de acusación parece formar parte de una vendetta de parte de algunos medios de prensa (que ante la caída de "Deflategate" quieren revivir "spygate" y ahora crear el "headsetgate") y porqué no decirlo, por parte de algunos equipos y sus fans que no soportan el prolongado éxito de los Patriots.
Acusaciones infundadas surgidas en los últimos días que según Belichick han llegado a un nivel insospechable.
"Creo de manera general que esto es algo triste, de verdad, el ver algunas historias escritas que obviamente tienen una agenda detrás, con desinformación y con comentarios de tipo anónimo. Escribir acerca de bebidas calientes, de basureros
y cosas por el estilo. Creo que simplemente es un comentario triste que ha caído a un nivel bastante bajo. En primer lugar vamos a decir que creo que nuestro programa aquí se basa en la competencia, en mejorar cada día y en tratar de trabajar duro, y no se basa en excusas", anotó el entrenador.
¿Cansado de estas acusaciones?
Lo cierto es que esta es solo una más de una seguidilla de acusaciones infundadas que solo intentan opacar cualquier merito conseguido por los Patriots y por echar abajo de una vez por todas al equipo más ganador de los últimos años.
Y para ello no importan los records ni las estadísticas. No importa que anoche Brady se convirtió en el QB que jugando para un solo equipo consigue más victorias (161). No importa que Brady en su carrera tiene un record de 182 triunfos y 55 derrotas (incluyendo playoffs), y que de esas 182 victorias, 77 han sido de visitantes.
Vale la pena mencionar –para aquellos equipos y fanáticos que no lo recuerdan– que hemos salido del Gillette y visitado sus estadios, y les hemos ganado a cada uno de ustedes, y no hay equipo que tenga record ganador frente a nosotros. Por último, somos el equipo con más triunfos logrados durante la última década, un record de 123 ganados y 38 perdidos (promedio .764) lo demuestra.
Pero no importan los records, la verdad es que no importa nada, las acusaciones seguirán viniendo. No nos extrañemos ver en el futuro cercano "spikegate" (tiene que ver algo raro en la manera que Gronkowski festeja) o "porristagate" (esas porristas tienen que estar pasando información a su equipo cuando bailan cerca de la banca de los visitantes), etc.
Pero volviendo a la frase que empecé diciendo en el párrafo anterior, me retracto, los records sí importan, y precisamente el record de los Patriots –que refleja su dominio en la liga– causa indigestión a nuestros rivales, a sus fans y a alguna prensa que también está cansada de vernos siempre arriba.