Imagínate este escenario:
Vas a un partido de tus amados Patriots, los ves ganar, conoces al dueño del equipo en su propio palco y acabas tu visita al estadio, hincándote para pedirle la mano a tu novia y recibiendo una respuesta afirmativa.
Esto fue precisamente lo que vivió Luis Valdivia en su visita al Soldier Field el pasado domingo durante el encuentro y victoria de los Patriots ante los Chicago Bears.
Luis, oriundo de Guadalajara y contador de profesión, es un apasionado fan de los Patriots que heredó esta pasión de su padre y que es compartida por toda la familia.
"Soy Patriots desde toda la vida, lo heredé de mi padre", nos dice Luis con orgullo durante la plática que tuvimos esta semana.
Una pasión que llevó a Luis a seguir al equipo de sus amores no solo por medio de las trasmisiones televisivas, sino, en ocasiones, asistiendo a los estadios para verlos en vivo y en directo, tal como ocurrió en Buffalo la temporada anterior. Una visita que marcaría un hecho inesperado por Luis: conocer a Robert Kraft.
"Fui a Buffalo con mi novia y llevé un sarape (cobertor de lana tradicional de México), pensando en intercambiarlo por un jersey de algun jugador, era una posibilidad remota, pero de cualquier manera quise intentarlo", nos relataba Luis de aquel primer encuentro.
"De pronto, vemos que Robert Kraft y su esposa pasan cerca de nosotros y ella nos señala, llamando la atención del dueño del equipo quien, estando cerca de Joe Cardona, le pide que le entregue un balón, el cual Kraft me lo entrega como presente. Me emocioné mucho que una persona tan importante dentro del equipo tuviera ese detalle".
Fue un momento inolvidable para Luis quien, dentro de la emoción de haber conocido y recibido un balón de manos de Robert Kraft, se le olvidó entregarle el sarape, una tarea que Luis se propuso hacer realidad en una próxima oportunidad.
"Después de ese viaje fuimos a Boston, llevé el sarape con la intención de dárselo al señor Kraft, desafortunadamente hubo mucha gente y no pude entregárselo. Me quedé con la idea de cómo hacerlo, busqué mucha gente para ver cómo dárselo, pero no tuve ninguna respuesta.
Sin embargo, a pesar de lo difícil que puede ser encontrarse con Robert Kraft los días de partido, Luis no se rindió en su deseo de hacerle entrega del regalo.
"De regreso escribí al equipo, contándole mi experiencia vivida en Buffalo, mi deseo de entregarle el sarape al Sr. Kraft y mi plan de darle un anillo de compromiso a mi novia. Mi petición fue escuchada y aceptada por el equipo. Ellos quedaron en volver a conectar conmigo antes del partido", añadió.
Sin embargo, no todo iba a marchar viento en popa. Ya estando en Chicago y con el acuerdo de ver a Robert Kraft en el campo, surgió un imprevisto que pondría en peligro ese tan soñado encuentro.
"Finalmente llegó el día del partido y me encontré con la mala noticia de que nuestros boletos, que compramos a través de una agencia, habían sido cancelados, y en esos momentos los precios de la reventa eran inalcanzables para mí".
Un serio imprevisto que llegó a oídos de Robert Kraft.
"Comuniqué de mi impase a los Patriots, quienes, minutos después, me dicen que Robert Kraft me hará llegar dos boletos para poder asistir al juego y hacer realidad mis planes para ese día. No solo eso, sino también me informaron que, durante el medio tiempo, vendrían a buscarme para tener mi encuentro con Robert Kraft en su propia suite del estadio".
EL ENCUENTRO
"Fue muy amable en su recibimiento, lo mismo que Jonathan Kraft quien, al saber que era de Guadalajara, me preguntaba acerca de las Chivas Rayadas, me decía que aún no han tenido un jugador mexicano en su equipo de fútbol soccer, los New England Revolution, y que sabía que Cuauhtémoc Blanco había jugado para el equipo de Chicago en algún momento".
Continuando:
"Y ese encuentro con Robert Kraft fue muy padre, me saludó con un abrazo. Le llevé una foto que nos habíamos tomado en Buffalo y la firmó. Le entregué el sarape y nos tomamos fotos. Me dijo de su amor por México y de su agradecimiento a los fans mexicanos por las constantes muestras de cariño que recibe por su parte de ellos. Me regaló un pin que me dijo, era muy especial; era del primer campeonato logrado, y que lleva la frase: "We're all Patriots".
Un encuentro soñado por Luis que, como era lógico, iba acompañado de nervios por lo increíble que parecía que esa reunión se estuviese llevando finalmente a cabo.
"Ya casi al despedirnos me dijo que me podía servir lo que deseaba de la mesa. Yo, nervioso y emocionado, solo opté por llevarme una botella de agua", nos contó Luis en medio de risas, añadiendo.
"Creo que tengo un bloqueo mental. Es muy complicado decir lo que pasó. En un lapso de 3-4 horas, los Patriots ganaron, me reuní con Rober Kraft en su suite y luego le entregué el anillo a mi futura esposa. Fue un día que quedará marcado para mí. Soy un fan muy cercano al equipo y estoy emocionadísimo por todo lo que viví".
Luis, un fan de los Patriots de toda la vida, cumplió su sueño en un día lleno de vivencias inolvidables.
Quién mejor que el mismo Robert Kraft para contribuir que esos sueños se hagan realidad y así, a través de Luis y Mafer, devolver un poco el cariño y aprecio que tiene él y los Patriots por sus fans de México.